Me hablaron al oído y la antorcha se apago, la desilucion sonó acompañada de las campanas de la depresión.
Ella a lo lejos mostraba su huida con lo que se siente los latidos sinceros de un amigo, el acompañante y testigo fiel de sables gastados mas no derrotados.
¡ Emigración! gritaba el cerebro junto con cortes extremos, un lápiz me impulsa ahora a escribir sobre el pasado.En hologramas te busco. quiero escuchar las mentiras tantas veces recitadas, pero no los puedo encontrar, la búsqueda de precios por nuestras cabezas quizás sea algunos golpes, momentos de rencor que después se volvió calma.
¡Terminaron!, se escucha decir en minutos de alegría, vuelve al corazón tormentoso las bebidas que pasaban por un túnel de desamor. Ahora ese instante pasa por mi cabeza, los calmantes de saber que eres feliz no son alucinantes todavía, mientras el odio, la perturbación de quienes no les gusta mi melodía obstruyen el ambiente del desahogo.
Juan C Muñoz/ 2012
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